Una noche, hace ya algunas semanas, me encontré una enorme cucaracha color “café-cereza” en un rincón de mi baño, ésta tenía largas antenas y patas gruesas, su cuerpecín acorazado contrastaba de manera perturbadora con el color blanco de la pared. Es curioso porque justo en este momento que la describo, me parece un espécimen bello, desafortunadamente para él llego a la casa equivocada, pues le tengo una especie de fobia (controlada digo no me desmayo ni nada) hacia las cucarachas, me provocan asco no porque anden entre basura y en el caño, más bien es por su textura, por tener tantas patas y tan gruesas (algo similar me sucede con los cien pies) o talvez es miedo que se incrementó cuándo me corretearon con una cucaracha de metro [1] por todo el anden de la estación Popotla.
Cómo bien imaginan no le tengo respeto a la vida de estos insectos y de manera casi inmediata pensé en liquidar a mi huésped, así que busque el insecticida, uno de esos que dicen que ves morir a los insectos instantáneamente. Oooo que terrible equivocación!!!!.... justo cuándo disparé contra él descubrí que tenia alas y voló casi al otro extremo del baño provocando que yo gritara como histérica (quién sabe si desperté a mis vecinos pues ya eran casi las dos de la mañana) , pero claro cómo buena tiradora no dejé de apuntarle y de seguir disparando, por supuesto que yo ya estaba fuera del baño, cerré la puerta con la esperanza de que el chorro de insecticida fuese suficiente para matarla, pero para mi infortunio o ¿fortunio? [2], mi puerta de baño tiene un hoyo en la parte de abajo por dónde la mugre “cuca” logró salir, cruzando por mi tapete , subiendo por mi ropa tirada en el suelo (que había dejado justo antes de entrar al baño), para finalmente llegar hasta la recamara dónde tengo miles de cajas y bolsas y mugre y media... justo aquí llegó a refugiarse. Escuché claramente cómo sus patas sonaban entre las bolsas que recorría cómo loca (supongo que el insecticida se debe sentir feo untado sobre todo el cuerpo) . Cuándo al fin dejé de escuchar ruidos, a pesar del miedo que tenía, empecé a buscarla primero con mucha cautela pero después de media hora de no haberla encontrado comencé a sacar todo lo que había en las cajas y en las bolsas con un resultado nulo, no encontré la cucaracha que claramente vi cruzar por mi baño y mi recámara y que estoy segura no pudo haber escapado del “rincón de chunches”, revisé y revisé y nada…
A la mañana sig. le pedí a mi hermana que revisara las cajas y bolsas a ver si ella tenía éxito… no encontró ni rastro de la famosa cucaracha, lo que me hace pensar que he visto “la señal”, esa que dice que la *Felicidad* entró por la ventana de mi baño y se quedó a vivir en mi casa, algo así como la escena dónde Frances (de Bajo el sol de Toscana) ve entrar a una serpiente en su casa y nunca la encuentra. Aunque para ser sincera me desconcierta un poco esta situación porque las serpientes en muchos países eran y son veneradas cómo Dioses, pero qué hay de las cucarachas?, será señal de que voy a sobrevivir la catástrofe del fin del mundo?....
Bueno, decido quedarme con la idea de que la *Felicidad* entró a mi casa para quedarse así que “a construir mis vías del tren”.
Pd. Nadie diga que le he rociado insecticida a mi Felicidad porque me pone triste.
[1]. Cucaracha de metro. Especie encontrada sólo en el metro de la ciudad de México se caracteriza por ser carnuda y más grande que el promedio de las cucarachas.
[2]. Fortunio. (Del lat. fortunĭum). Suerte, buena fortuna con rima consonante con infortunio.
Cómo bien imaginan no le tengo respeto a la vida de estos insectos y de manera casi inmediata pensé en liquidar a mi huésped, así que busque el insecticida, uno de esos que dicen que ves morir a los insectos instantáneamente. Oooo que terrible equivocación!!!!.... justo cuándo disparé contra él descubrí que tenia alas y voló casi al otro extremo del baño provocando que yo gritara como histérica (quién sabe si desperté a mis vecinos pues ya eran casi las dos de la mañana) , pero claro cómo buena tiradora no dejé de apuntarle y de seguir disparando, por supuesto que yo ya estaba fuera del baño, cerré la puerta con la esperanza de que el chorro de insecticida fuese suficiente para matarla, pero para mi infortunio o ¿fortunio? [2], mi puerta de baño tiene un hoyo en la parte de abajo por dónde la mugre “cuca” logró salir, cruzando por mi tapete , subiendo por mi ropa tirada en el suelo (que había dejado justo antes de entrar al baño), para finalmente llegar hasta la recamara dónde tengo miles de cajas y bolsas y mugre y media... justo aquí llegó a refugiarse. Escuché claramente cómo sus patas sonaban entre las bolsas que recorría cómo loca (supongo que el insecticida se debe sentir feo untado sobre todo el cuerpo) . Cuándo al fin dejé de escuchar ruidos, a pesar del miedo que tenía, empecé a buscarla primero con mucha cautela pero después de media hora de no haberla encontrado comencé a sacar todo lo que había en las cajas y en las bolsas con un resultado nulo, no encontré la cucaracha que claramente vi cruzar por mi baño y mi recámara y que estoy segura no pudo haber escapado del “rincón de chunches”, revisé y revisé y nada…
A la mañana sig. le pedí a mi hermana que revisara las cajas y bolsas a ver si ella tenía éxito… no encontró ni rastro de la famosa cucaracha, lo que me hace pensar que he visto “la señal”, esa que dice que la *Felicidad* entró por la ventana de mi baño y se quedó a vivir en mi casa, algo así como la escena dónde Frances (de Bajo el sol de Toscana) ve entrar a una serpiente en su casa y nunca la encuentra. Aunque para ser sincera me desconcierta un poco esta situación porque las serpientes en muchos países eran y son veneradas cómo Dioses, pero qué hay de las cucarachas?, será señal de que voy a sobrevivir la catástrofe del fin del mundo?....
Bueno, decido quedarme con la idea de que la *Felicidad* entró a mi casa para quedarse así que “a construir mis vías del tren”.
Pd. Nadie diga que le he rociado insecticida a mi Felicidad porque me pone triste.
[1]. Cucaracha de metro. Especie encontrada sólo en el metro de la ciudad de México se caracteriza por ser carnuda y más grande que el promedio de las cucarachas.
[2]. Fortunio. (Del lat. fortunĭum). Suerte, buena fortuna con rima consonante con infortunio.
¡Fuchiiiiii! Yo la verdad sí las odio con odio jarocho, sería completamente incapaz de encontrarle el lado filosófico-profético a una visita así. Aunque, visto de otro modo, lo profético es que se esfumó, ¿no?
ResponderEliminarTe odio. Tengo hambre pero ahora con esta anécdota tuya no voy a poder comer hasta que se me pase el asquito. Si caigo famélico al suelo es tu culpa :P
¡Le rociaste insecticida a tu felicidad!
ResponderEliminarYo he tenido varios huéspedes en los últimos meses.
El más representativo fue un colibrí que se quedó por unos minutos posado en los cactus y tratando de excapar por le ventana en un tarde semilluviosa.
Y la que llegó para quedarse fue una de esas mariposas (ratones viejos creo que les llaman). Un día la vi quieta en el techo de mi cuarto, salí de vacaiones por algunos días y al regresar la encontré en el piso, patas pa'rriba.
Ahora sus restos descansan en una de mis macetas.
Creí que se desintegraría rápido, pero ya lleva como 6 meses y aún se ve muy completa jaja.
Juajua inche roy con su comment me dió ternura pero a la vez me dió risa, mmmh pues para empezar hubeiras agarrado unos zapatos pesados y l ahubieras pisado y que sonara así crraaaaag!!! pero su muerte sería rápida y segura. Lo malo es que si ya no la encontraste pronto vas a tener a más habitantes voladoras por ahí!!!
ResponderEliminarEn primera Chayo es más fácil pisar una rechoncha cucaracha y sentir como cruje entre tu zapato y el piso, lo del insecticida es como darle una muerte asistida, aunque seguramente el veneno o químicos le dará una muerte dolorosa y su cuerpo se retorcerá sufriendo convulsiones varias. En segunda, necesitas buscar una señal de felicidad mas inspiradora que una horrenda cucaracha, por favor!
ResponderEliminarRodrigo (R): Nombre y eso que no platique de las cucarachas que se encuentran en la comida :P de cualquier “mac-roñas”. Lo profético viene cuándo un animal que te aterra entra en tu casa para aparentemente desaparecer.
ResponderEliminarGarabatoons: Tienes razón que mal que haya sido un animal tan despreciable, pero en wall-e la cucaracha es la buena onda, de todas formas espero más “señales” con animales varios y bueno también señales materializadas en hechos.
Rodrigo(Roy): No me chingues!, seguro fuiste de esos niños que hacías todo lo contrario a lo que te pedían :(. Bonitos huéspedes, yo también tengo el cuerpo de una mariposa nocturna (o más bien dicho polilla) está guardada en una caja bonita junto con otros cuerpos de insectos, listos para ser pegados a uno de mis cuadros, ya lleva cómo dos años así que tendrás ese cadáver por largo tiempo en tu maceta. Tengo un bebedero para colibrí en mi ventana pero creo que le falta flores alrededor para ser llamativo. Jua jua, me encanta tu energía, si das ternura :P
Maikinis: Es que aplastarla con zapato también es locote, esa sensación de cartílagos rompiéndose es muy perturbadora, yeack!. Cierto tendré “rete harta felicidad“ si pusiera huevos waaaaacccaaaalllaaa!, pero cómo es una cucaracha-señal en realidad no existe.
¡Otro día sin poder desayunar hasta medio día! :P
ResponderEliminarLas cucarachas les tengo asco, desde un día que voló!!! y senti como caminó en mi espalda, es una sensación horrible.
ResponderEliminarPisar una cucaracha así sea con una bota de minero, siento como le truena cada una de las capas, patas, antenas, alas que tenga.